Pinto dice adiós. Foto Casa Presidencial
¡No se llegó a un acuerdo! Ambas partes, Fedefútbol y Jorge Luis Pinto se estrecharon las manos para decirse adiós. El técnico colombiano cerró un ciclo y se va de Costa Rica por la puerta grande.
Es sin duda hasta este momento el director técnico más exitoso con la Selección Nacional, y por qué no decirlo, de Centroamérica y de los mejores del área. Llegó al equipo entre dudas en el 2011 y ahora se retira dejando a la tricolor como la número 16 del mundo, un equipo histórico que sorprendió al mundo al alcanzar los cuartos de final en el Mundial.
Después de la participación en Brasil 2014, Federativos y técnico esperaron a que bajara la euforia y esta semana se sentaron a conversar. Primero Jorge Luis Pinto les pasó un informe donde resumía y detallaba lo ocurrido en tierras cariocas, su trabajo y el del cuerpo técnico.
Luego se avocaron a tratar otros temas más sensibles, primero nuevas condiciones del cafetero, por ejemplo temas salariales, así como funciones a lo interno de la Fedefútbol, cosas con la que no lograron ponerse de acuerdo.
De los gritos que pedían su salida a las lágrimas de felicidad
El técnico siempre agradeció al pueblo el apoyo.
Fue en setiembre del 2011 cuando entró para su segundo ciclo. El mexicano Ricardo La Volpe había salido entre polémica dando paso al colombiano, alguien que había salido por la puerta de atrás en el 2005, camino al mundial de Alemania.
Después de varios amistosos donde sacó buenos resultados, como el empate a dos ante España en el Estadio Nacional o el gane ante Gales en febrero del 2012, llegó la cuadrangular de Concacaf.
Hacemos mente y sí, fue en aquel juego contra El Salvador –empate a dos- donde la afición inició un divorcio con el técnico y el equipo. Las derrotas ante México hicieron más grande la herida, aun así se clasificó al hexagonal final pero con un sabor muy amargo.
Llegó la magia en la etapa final del camino hacia Brasil, logró conjuntar al equipo, aunque siempre se le criticó por ciertos jugadores. Sin embargo no se le pudo reprochar que volviera a colocar al equipo tico en una cita mundialista, además cumplió su sueño… dirigir en una Copa del Mundo.
Ya lo demás es historia, el país la conoce, Jorge Luis Pinto se convirtió en un técnico a seguir, un técnico al que le pusieron los ojos.
Las lágrimas de emoción y su voz quebrada son signos de lo que aprecia Pinto el gesto de agradecimiento de los costarricenses, algo que nunca se olvidará ni él ni el pueblo tico. Hoy se va un técnico que puso a soñar y a llorar a todo un país amante del fútbol.