En mayo pasado la CNE inspección varios cerros. Imagen tomada del perfil de Facebook de la CNE
Nueve cerros cercanos a poblaciones del Gran Área Metropolitana (GAM) preocupan a las autoridades por ser considerados como deslizamientos activos. Si bien la época lluviosa no ha sido tan fuerte como en otros años, la alerta siempre se mantiene vigente para estos sitios.
Ellos son los cerros Tapezco y Chitaría en Santa Ana, el Tablazo en Desamparados, Burío en Aserrí, La Cascabela en Alajuelita, Pacacua en Mora, Santiago en Puriscal y los deslizamientos en los cerros de Escazú, como en el sector de Lajas.
“Es un tema de permanente cuidado y de estar al tanto. Principalmente estos, pero no descartamos que hayan otros que puedan ser afectables… Hay una organización y una visita frecuente a estos lugares, existe estaciones automáticas que opera el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) con los que se monitorean las lluvias”, dijo Esquivel.
En dos de estos deslizamientos se mantienen dos cámaras en línea que transmiten información en video durante las 24 horas. Sin embargo, producto de las condiciones climáticas vividas en lo que va del año no ha existido alguna actividad irregular que incremente la preocupación.
“En general la zona ha estado deficitaria de lluvia, excepto a partir de antier (martes) que empezó a presentarse más lluvia en esos lugares, pero todavía la lluvia no da para tanto”, describió Esquivel.
Sobre el desprendimiento de sedimentos en la cuenca del río Sarapiquí, la CNE se mantuvo entre miércoles y jueves en el sitio. El descarte de afectación a las poblaciones más cercanas se mantiene al igual que una posible incidencia a una planta propiedad del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).
“Lo que ha venido sucediendo es el escenario que se estuvo anunciando e indicando a las personas, el material iba a empezar a ser erosionado paulatinamente por la misma dinámica del río. Estas lluvias han favorecido mucho ese proceso, parte del material se ha ido lavando, se ha ido depositando de camino donde hay áreas muy importantes. Ese ha sido el comportamiento”, recalcó el funcionario.
No existe una apertura total del cauce del río, entonces se mantiene la vigilancia y las recomendaciones siguen siendo las mismas: limitar actividades recreativas como el rafting o la natación, hasta que las condiciones no sean normales.
“Con relación al resto del país, tenemos que tomar en cuenta que cerca del 60% del territorio nacional tiene una condición de terreno de fuente pendiente o montañoso, esto nos hace considerar que hay un alto porcentaje del territorio nacional que es vulnerable a sufrir algún tipo de deslizamiento bajo condiciones de lluvia o actividad sísmica”, citó Esquivel.
También se alertó sobre algunas rutas viales que son vulnerables a deslizamientos; tales como la ruta 32, la 27, el Cerro de la Muerte, la Zona Sur entre Paso Real y Palmar Norte, además de la carretera vieja a Puntarenas.
Condiciones climáticas
Rebeca Morera, meteoróloga del IMN, comentó que en los últimos días los aguaceros fuertes se han concentrado en gran parte del GAM. Se vislumbra que estas condiciones se mantengan para el resto de la semana que está en curso.
“Los aguaceros con tormenta eléctrica no solo han pasado aquí en el Valle Central, también el Pacífico Central y Norte. Los factores locales de humedad y temperatura matutina favorecen, también tenemos la cercanía de la Zona de Convergencia Intertropical”, afirmó Morera.