El bajo crecimiento mostrado por la economía, podría ser un lastre para la venta de casas y vehículos en las ferias de casas y automóviles anunciadas para esta semana.
Si bien, algunos sectores de la economía han dado señales de mejora, como construcción y servicios empresariales, el resto sigue dando señales de desaceleración, con tasas de crecimiento inferiores a las un año antes.
Esta situación puede ser determinante para una familia que busca quedarse con bienes durables como una casa o un carro.
¿Es el momento correcto para endeudarse?
Para Hairo Rodríguez, gerente del banco Cathay, en la actualidad hay dos elementos que se contraponen y que pueden afectar la decisión de compra de las personas.
Por un lado, están las tasas de interés, que en ambas monedas son muy favorables pues han bajado, pero por el otro lado la economía se ha desacelerado.
A su juicio, cada persona o familia debe valorar sus condiciones particulares, antes de tomar una decisión de este tipo.
Esa autoevaluación también es recomendada por Eugenia Meza, gerente de Mucap, pues el momento pudiera ser el ideal para un segmento de la población, pero no necesariamente para todos.
“Todo depende de la situación de cada deudor o de cada familia. Aunque la economía como un todo no esté creciendo mucho, hay algunos sectores que sí lo están haciendo, unos crecen más que otros, igual sucede con las personas”, explicó.
Ambos especialistas recomiendan que las personas constaten si cuentan con suficiente capacidad de pago para honrar oportunamente la deuda que va a adquirir. Para esto deben revisar su flujo de ingresos y gastos y analizar cómo quedaría en caso de asumir un endeudamiento.
No pierda de vista el riesgo cambiario
Tanto en ferias de vivienda como de vehículos es común encontrar precios denominados en moneda extranjera. Esto implica que los eventuales deudores también se deberían preocupar por el riesgo cambiario que asumen.
“Cada persona debe interiorizar el riesgo cambiario, pues luego de varios años de contar con un tipo de cambio casi fijo, se nos olvida que el tipo de cambio ya no tiene piso ni techo y que las condiciones en el futuro podrían variar. En el caso de una deuda de largo plazo, es especialmente importante tener claro que en 20 o 30 años el tipo de cambio de seguro se va a mover”, explicó Rodríguez.
Meza por su parte, considera que lo recomendable es que las personas se endeuden en la misma moneda que generan ingresos, pero también existe un grupo de personas que tiene ingresos lo suficientemente altos para asumir con holgura los movimientos en otra moneda. “Estos casos deben analizarse individualmente”, dijo.