A inicios de agosto, el Ministerio de Hacienda presentó oficialmente los 8 proyectos que conforman la reforma fiscal que impulsa el actual Gobierno.
Sin embargo, desde entonces poco se ha vuelto a hablar sobre el tema.
Para conocer los pormenores de las gestiones de las últimas semanas, crhoy.com conversó con el viceministro de Ingresos, Fernando Rodríguez.
El funcionario detalló que, entre otras cosas, las calificadoras de riesgo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han estado muy pendientes del trámite legislativo e inclusive le toman el tiempo.
Hace tiempo no se escucha nada de los proyectos fiscales. ¿Cómo va el trámite legislativo?
Van caminando lento. Pero era esperable por el contexto, la Asamblea y particularmente (la Comisión de) Hacendarios están metidos en el análisis de presupuesto y más bien han hecho un esfuerzo para ver el proyecto contra el fraude fiscal
No está parado ese proyecto en particular, pero evidentemente no avanza a la velocidad que lo haría en otras circunstancias. Porque los diputados tienen las sesiones ordinarias y extraordinarias para ver el tema de presupuesto.
Entonces podemos decir que el avance es lento, pero no es igual en todos: entiendo que los proyectos que están más avanzados son los de lucha contra el fraude, el de exoneraciones y el de Caja Única, con diferentes grados de avance, pero por lo menos se han ido moviendo.
Nuestro proyecto prioritario era el de lucha contra el Contrabando, que ya se aprobó, es ley y estamos esperando que se publique para que entre en vigencia.
Espero que esto sea antes de que termine el mes con el fin de que podamos aplicar las sanciones al final del año, pues es la época en la que se incrementa el contrabando.
Los 5 proyectos necesarios
Hacienda enfocará sus esfuerzos en darle impulso a 5 de los 7 proyectos fiscales que conforman la reforma fiscal. Posterior a eso, se dará espacio a las reformas de los tributos de ventas y renta.
¿Los proyectos tienen algún orden o prioridad?
El proyecto de lucha contra el fraude es el que tiene la 1.
Le sigue el de personas jurídicas, porque perdemos una cantidad de plata importante para el Ministerio de Seguridad.
Dejar al Ministerio de Seguridad desprovisto de una fuente de sus recursos en una coyuntura como la actual es muy peligroso. Hemos venido insistiendo en eso. Nos ha costado mucho que camine ese proyecto. No ha avanzado tanto, pero se ha trabajado en Comisión.
El de Caja Única (tercero) se ha venido discutiendo y se ha ido a explicar a la Asamblea. Los diputados le están haciendo observaciones.
También está el de Pensiones (el cuarto) que ha avanzado más lento. Es extraño, porque avanza lento aunque uno pensaría que tiene más consenso, porque todo el mundo está de acuerdo en el proyecto.
¿Como el de contrabando?
Sí, como el de Contrabando. Llegó un momento en que dijimos: ¿Todos estamos de acuerdo? Entonces aprobémoslo. El de Pensiones nos permitiría ahorrarnos ¢20.000 millones en primera instancia y ahorros en el año siguiente. Entonces, entre más rápido lo aprobemos más ahorros veremos en el corto plazo.
Y después está el de exoneraciones. Este sería el quinto en orden de prioridad. Ese parece que vas más rápido y entiendo que doña Rosibel (Ramos, diputada socialcristiana) se ha comprometido a sacarlo en las próximas semanas. Ya se discutieron algunas diferencias que hay alrededor del proyecto y entonces ya va.
Hace falta por enviar un proyecto de reglas fiscales, pues todavía se está trabajando en esto.
¿Las reformas a los impuestos de renta e ventas?
La idea nuestra es que esos 5 pudiera avanzar en estas semanas. Queda al final de la prioridad, en cuanto a tiempo, el de IVA y Renta. No porque no los ocupemos, sino porque son proyectos que se van a tomar más tiempo en ser analizados y aprobados.
La idea es que pudiéramos sacar los pequeñitos primero para después llegar a los grandes. Sé que ya se cumplió con los trámites de publicarlos y llevarlos a Comisión. También hay subcomisiones para cada tema, pero no creo que los diputados hayan tenido tiempo para trabajar en estos proyectos.
Probablemente el trabajo sobre estos proyectos se reactive en diciembre. La idea nuestra es que se vean con fuerza a partir del 1° de diciembre, cuando comiencen las sesiones extraordinarias y particularmente en enero.
En cuanto a IVA y Renta hemos tenido acercamientos con algunos grupos, conversaciones y actividades que nos permiten ir a hablar del proyecto y recibir observaciones o tomar nota sobre algunos detalles o preocupaciones.
LEA: Hacienda propone subir IVA al 15%; tributo se cobrará en precio final de bienes y servicios
Calificadoras vigilan de cerca
El trámite de la reforma fiscal no solo es esperado por los habitantes del país, sino que inversionistas, calificadores de riesgo y organismos internacionales mantienen vigilancia permanente sobre lo que suceda con estos proyectos en la Asamblea Legislativa.
¿Cuándo sería un plazo óptimo o máximo para que se aprueben los proyectos?, entendiendo que óptimo y máximo pueden ser diferentes.
Si de los 7 proyectos que mencioné, los 5 primeros avanzan rápido, yo creo que podríamos tener hasta agosto (del 2016) para poder aprobar los proyectos.
Pero si estos otros proyectos no avanzaran tan rápido, sí necesitaríamos señales de que los proyectos se muevan en los primeros cuatro meses del próximo año.
¿Por qué estas diferencias? Porque nos están midiendo el avance que tengamos en la Asamblea Legislativa.
En estos últimos días la gente de Fitch estuvo en el país y tuvieron conversaciones con gente de la Asamblea. Ya ellos se preocupan más por medir el pulso del otro lado (el Congreso), porque el grado de avance en la solución del problema vendrá más por lo que suceda en la Asamblea que por lo que hagamos nosotros.
Los espacios administrativos son muy limitados; estamos llegando al límite de lo que se puede hacer desde la perspectiva nuestra. Ellos (Fitch) lo saben, también el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En las próximas semanas también estará aquí (el Fondo) y se van a reunir con gente de la Asamblea Legislativa porque quieren saber cómo ven los diputados el problema: si lo ven urgente o no, o si van a apoyar la propuesta.
Idealmente, ojalá pudiéramos tener los 5 proyectos prioritarios antes de que terminen las (sesiones) extraordinarias, pero si no al menos antes de que llegue la discusión del próximo presupuesto.
¿Vendrán las otras calificadoras: Moody’s y S&P?
Todas. Fitch llegó primero, pero las otras vendrán al finalizar el año o el año que viene. A veces se esperan a que el FMI haga su análisis.
En las actuales condiciones ellos no nos van a permitir avanzar hasta que no vean señales contundentes, como proyectos aprobados.
¿Hacienda ha presionado o incentivado que los diputados sigan viendo los temas?
Lo estamos haciendo en términos de tiempo. Les decimos que no podemos quedarnos mucho con esto.
Nos hemos enfocado en acercarnos a los diputados con vista en los 5 proyectos pequeños. Estos nos ayudarían entre ingresos y gastos a llevar el déficit a un 5% del PIB, y eso no soluciona el problema pero abre un espacio en términos de tiempo para negociar los proyectos de IVA y Renta.
Si se aprueban en el 2016 y el dinero comienza a llegar en el 2017 ya no hay tanto problema.
Pero si no pasa nada y el año entrante cerramos con un déficit del 6% del PIB y empezamos el 2017 pensando en otro 6%, ahí la presión sí es mucho mayor.
Con esto garantizamos que no hagamos presión a la hora de financiarnos y mayor estabilidad de tasas, que es fundamental en la recuperación económica.
Esa es la apuesta: vamos con los proyectos pequeñitos para que los diputados se puedan concentrar en los grandes.
Controlando el déficit, al menos no crece más…
Esa es una buena señal. Se lo explicamos a la gente Fitch pensando en un plan de varios años. El mismo FMI nos ha dicho que pensemos en ajustes de 4 o 5 años. Nuestros escenarios tiran hacia el 2020.
LEA: Cambios en renta dejarán a Hacienda ¢3.200 millones más al año
Condicionado
Entre las manifestaciones que han dado los legisladores sobre la reforma fiscal, sobresale la opinión del diputado oficialista Ottón Solís, quien favorece una transformación de los impuestos actuales pero es crítico con aspectos del gasto público actual.
El diputado Ottón Solís condiciona el apoyo a los impuestos a que se descarte el uso de un Data Center…
Eso es del presupuesto. Entiendo que la preocupación de don Ottón es por el dinero que estamos utilizando para alquilar en Data Center. Pagamos el alquiler en Codisa, eso es porque no tenemos uno propio, ese es nuestro soporte.
El ICE tiene uno en Guatuso y podemos utilizarlo, pero no quiere decir que podemos dejar Codisa, porque nosotros tenemos sistemas que sin ellos el país se paraliza. No podemos tener un solo soporte, porque necesitamos redundancia.
Nuestra idea es que tengamos el nuestro propio y pagarle al ICE para entrar a Guatuso. Para tener el centro de datos principal y el del ICE como secundario.
Si a nosotros se nos cae el sistema, se paraliza el comercio del país, porque no se podría usar el sistema Tica. Ni podríamos cobrar impuestos con el ATV, o se nos cae Integra y no podríamos pagar salarios a nadie en el Gobierno Central.
No podemos construir nuestro centro de datos este año, porque tuvimos que recortarlo del presupuesto, entonces tenemos que alquilar, porque si nos salimos de Codisa nos quedamos sin sistema. Necesitamos eso y la redundancia.