
Intel tiene su planta, una de las principales en todo el mundo, en Belén. Imagen tomada de Wikipedia.
Desde hace varias semanas se manejan versiones no oficiales y rumores de que Intel decidió movilizar las operaciones que maneja en Costa Rica y cerrar la planta de ensamblaje de microprocesadores, que tiene en Belén. Pero la salida del gigante tecnológico podría estar aún más cerca.
Un alto funcionario de Gobierno dijo a crhoy.com que la compañía norteamericana estaría iniciando esa salida y anunciando el cierre, incluso antes del final de este mes. Pero desde las autoridades competentes, sólo se maneja silencio.
Este jueves, se le consultó a la presidenta Laura Chinchilla por la posibilidad, pero afirmó que no se refiere a temas de corporaciones.
Sin embargo, en el pasado, distintas autoridades han conversado sobre el impacto positivo que tuvo Intel en el país, en cuanto a generación de empleo, exportación e indicadores de la economía. El 26 de abril del 2012, la ministra de Comercio Exterior Anabel González celebró los 15 años de presencia de la empresa en el país, con un artículo publicado en un diario de circulación nacional.
En ese momento, la jerarca recordó el inicio de lo que llamó “el vector de desarrollo más importante del país en los últimos 15 años”. González también resaltó que de 1997 al 2010, Intel aportó $800 millones en Inversión Extranjera Directa (IED), lo que representa un promedio anual del 6% de las inversiones recibidas del extranjero.
Intel en Costa Rica
Además su contribución al intercambio con el exterior se refleja en un acumulado de exportaciones entre 1998 y 2011 de $23.251 millones y un acumulado de importaciones por $18.826 millones, aportando en promedio anualmente el 22% de las exportaciones y el 14% de las importaciones nacionales.
Actualmente, genera 2.700 puestos de trabajos directos. En noviembre eliminó 100 plazas y a inicios del mes pasado anunció que realiza una reestructuración que implica el cierre de otros 40 puestos que serían movilizados, además de la apertura de 50 en posiciones de mayor sofisticación desarrollo de software y bases de datos.
En el 2010, Intel presentó un estudio sobre el impacto que ha tenido su presencia en la economía costarricense, elaborado por la firma Consejeros Económicos y Financieros (Cefsa), en el cual se mencionó que es equivalente al 6% del Producto Interno Bruto (PIB).
El estudio señaló que Intel exporta anualmente desde su planta en Costa Rica unos 2.000 millones de dólares, lo que representa cerca del 20 % de las exportaciones totales de bienes del país y el equivalente al 6 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Según datos del Comex, en el 2013 el mayor rubro de bienes exportados fue el de procesadores y controladores, por más de $2.377 millones de dólares, que equivalió al 20,8% del total de la participación.
A enero de este año, la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) estimó la exportación de componentes electrónicos para microprocesadores en $2.388,2 millones.
Sin embargo, ahora las autoridades guardan silencio. En marzo, crhoy.com consultó por el futuro de la empresa y su posible salida a la ministra González, así como a Laura Chinchilla y a la directora de la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde) Gabriela Llobet, pero ninguna respondió. Ni lo negaron ni lo afirmaron. Solamente dijeron que debe ser la propia corporación quien lo aclare.
También en ese momento, la gerente de Asuntos Corporativos de Intel Karla Blanco negó la salida y afirmó que se mantendrá la presencia en los próximos dos años. Ahora nuevamente se intentó conocer su criterio, sin embargo la agencia que maneja la comunicación de la empresa indicó que se encuentra fuera del país. Se le envió un correo electrónico con consultas, pero no se obtuvo respuesta la tarde de este jueves.
Intel se mueve en el mundo: pérdidas, cierres y anuncios
Desde hace un tiempo, la empresa viene sufriendo algunas bajas y cambios en sus operaciones a nivel mundial. Además se han anunciado cierres de plazas o reestructuraciones.
En abril del año pasado, Intel anunció que sus ganancias cayeron 25% entre enero y marzo. El beneficio neto bajó de $2.738 millones a $2.045 millones, en ese lapso, entre un año y otro. Además el total de ventas fue de 2,5% menos, con respecto al primer trimestre del 2012.
En Costa Rica también han habido momentos de tensión, desde el 2011 cuando el entonces Gerente dijo que la posibilidad de que se dieran más impuestos, a partir del paquete fiscal que se discutió al inicio de la administración Chinchilla-Miranda generaba incertidumbre a la inversión extranjera. Incluso dijo que en el 2010 se detuvo una gran inversión en el país.
En setiembre del año pasado, el periódico estadounidense Boston Globe informó que la empresa cerraría su planta en Massachusetts y con ello 700 puestos se eliminarían. La explicación fue que el sitio y las instalaciones no suplían lo necesitado.
En enero de este año, la agencia Reuters publicó que tras bajas ventas de computadoras, por la competencia de tecnología móvil, decidió no abrir una planta nueva en Arizona. Esta apertura fue una que el presidente Barack Obama puso como ejemplo de la capacidad de manufactura de su país, en el 2012, cuando se construía. Era un proyecto de $5 mil millones, pero se descartó y se decidió concentrarse en otras instalaciones.
Sin embargo, en México si inauguraron el Centro de Diseño de Guadalajara en la planta ubicada en la Zona Metropolitana de esa ciudad, capital del estado de Jalisco. según detalló El Economista.
Eso es en el mundo. Pero en medio de las dudas, los rumores y el silencio, el anuncio de la salida de Intel de Costa Rica podría estar cerca, pero las autoridades que alguna vez hablaron de los beneficios, evitan responder ante lo que podría ser el lado negativo de la relación de Costa Rica con el gigante, relación que podría cambiar muy pronto.