Con sólo estar un rato cerca del Correo en San José usted puede escuchar el ofrecimiento de líneas prepago de diversos proveedores, así de sencillo es adquirir alguna; de acuerdo con la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) quienes venden este tipo de líneas deben llevar un registro; es decir, es imposible que existan líneas sin personas asociadas.
Sin embargo, este fácil acceso a dado pie para que se den delitos de suplantación de identidad. Un caso reciente es el que sufrió Jason Fernández. Una persona sacó a su nombre una línea telefónica y la empleó para hacerle amenazas a un tercero.
Lo que siguió fue una tortuosa tramitología para cancelar la línea que, no pidió, y que estaba a su nombre; y en su operador le aseguraron que esta situación no era controlable y hasta le advirtieron que se puede volver a dar.
“Me doy cuenta que hay una persona que está recibiendo amenazas telefónicas por medio de una línea a mi nombre, voy el pasado domingo a Movistar a cancelar la línea, primero me dicen que no se puede cancelar porque al ser una línea prepago, lo que tiene que pasar para que la línea se cancele son 120 días sin recargar el teléfono, la primera opción que me da era cancelar el chip, entonces así deja de funcionar. Y la otra opción era reportarlo como robado, que eso fue lo que hicimos. En el OIJ me dijeron que no, que eso no es suplantación de identidad, que primero tengo que agotar todo el proceso administrativo que es con Sutel”, explicó el oriundo de Cartago.
“Fui a la plataforma de Movistar en Terramall a decirles que yo nunca he tenido un servicio con ellos y cómo a ellos se les ocurre activar una línea a mi nombre y entonces me dicen que es muy fácil, que cualquiera compra una línea en la calle de esas que venden, ellos la activan con el número de cédula con el que le da la gana; lo que significa que cualquiera puede hacerlo con un nombre falso. Yo les exijo que no vuelvan a activar con mi número de cédula y me dicen que ellos no pueden hacer nada que la situación se puede volver a dar, que lamentablemente el sistema se activa solo. Así que cualquier persona que se sepa mi cédula puede activar una de estas líneas”, añadió Fernández.
En la Sutel le indicaron que en 10 días presente la queja con ellos, en caso de que no le resuelvan nada con su proveedor. Fernández aseguró que llamó en varios ocasiones tenés a un call center, que está en México, pero no le brindan soluciones a los clientes.
De acuerdo con Eduardo Castellón, vocero de Sutel, le corresponde al OIJ investigar este tipo de casos ya que se debe a una suplantación de identidad. Cada línea que se encuentra en la calle está asociada a una persona; es por esto que entre las especificaciones para la venta es que se lleve un registro.
“Hay directrices, cada línea debe estar asociada a una persona. Los proveedores deben garantizar eso que esté asociada a una persona. Al momento de la venta deben tomar una foto a la cédula, quien vende debe llevar un registro obligatorio”, detalló Castellón.
Inclusive esta situación podría repercutir en caso de que a una persona se le cobre llamadas por “molestar” al 911, a un número que esté a su nombre, sin necesariamente ser el responsable.
Habrá web para consultar
Castellón adelantó que en este año, la Superintendencia sacará una página web en donde los dueños de líneas prepago pueden actualizar sus datos.
Ahí se podrá ver cuántas líneas están asociadas a cada persona y se podrá verificar este tipo de delitos.
Por esto, en caso de error y que le “aparezcan” líneas a su nombre de las cuales usted no solicitó, tendrá esta herramienta a mano para verificar y en caso de que suceda reclamar.
Por ahora, debe “monitorear” con los distintos proveedores para conocer cuál es su estatus.