Unos 100 adultos mayores con VIH viven en albergues, Conapam acepta haberlos ignorado en sus programas. CRH.
En este momento, cinco adultos mayores se encuentran internados en el Hospital Nacional de Geriatría y Gerontología, Dr. Raúl Blanco Cervantes, porque al parecer fueron victimas de abuso sexual y otros 100 con VIH están en dos albergues ubicados en Pavas y La Uruca.
Así lo confirmó el Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor (Conapam), ysegún su presidenta, Zulema Villalta, estos dos temas son de gran preocupación, pero si se habla de adultos mayores con VIH, la deuda de este órgano es total.
“El Estado no tiene una respuesta para esta población. No es que nos vamos a quedar con los brazos cruzados, pero ellos no estaban contemplados dentro de nuestros programas. Acepto “mea culpa” por no haberlos tenido dentro de los programas urgentes de poblaciones vulnerables que tenemos que asistir,” recalcó Villalta.
Conapam va a realizar una visita a los dos albergues donde se encuentran estos adultos mayores para verificar las condiciones de los lugares, las acciones realizadas por la Caja Costarricense de Seguro Social y las atenciones que reciben por parte de los encargados de cada centro.
De acuerdo con Villalta, todos estos adultos infectados van a parar a estos lugares porque en ningún otro centro los reciben, e incluso hay jóvenes albergados en estos centros que reciben a personas enfermas de VIH. Villalta destacó que en Paso Ancho hay otro lugar donde al parecer hay abuelitos infectados, por lo que van a verificar esta información para actuar “de inmediato, ya que no hemos vuelto los ojos hacia ellos,” destacó.
Para la jerarca, esta población se infecta porque generalmente las mujeres dejan de tener relaciones sexuales con sus esposos por sus cambios hormonales y ellos buscan fuera de su hogar suplir sus necesidades sexuales, infectándose con VIH, aunque también hay casos donde han sido víctimas de abuso.
El acercamiento de los familiares de estas personas es fundamental, según Villalta, ya que muchos de ellos viven deprimidos y solos porque sus parientes se olvidaron que existían.