Tras casi seis años, el Plan de Acción de la Estrategia Nacional de Cambio Climático, donde se contempla la meta carbono-neutro al 2021, no ha sido oficializado y en un reciente informe la Contraloría General de la República (CGR) advirtió sobre este asunto.
La CGR sostiene que esta situación resta vinculación con las instituciones involucradas. El ente contralor subraya que la administración considera suficiente la ‘presentación pública’ del plan e identificaron debilidades en el mecanismo utilizado por la Dirección de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) para monitorear el cumplimiento de metas.
“En este sentido, la incorporación del Plan de Acción de la Estrategia Nacional de Cambio Climático en el PND 2011-2014, puede ayudar a la dotación de los recursos públicos necesarios para su financiación. No obstante, el Órgano Contralor considera que la presentación pública del Plan de Acción no sustituye su oficialización, mediante un instrumento formal que lo haga vinculante para las instituciones públicas involucradas”, cita el informe DFOE-AE-IF-11-2014.
Para la CGR, la falta de oficialización del plan ocasiona que la implementación de acciones esté supeditada a los acuerdos que logre concretar la Dirección de Cambio Climático y a la prioridad establecida de parte de los entes ejecutantes. “Esta situación pone en riesgo la ejecución de las acciones tendentes a disminuir impactos sociales, ambientales y económicos del cambio climático”.
Consultado sobre el tema, William Alpízar, director de la Dirección de Cambio Climático, indicó que ya están trabajando en la documentación para oficializar la propuesta y que posiblemente lo harían antes de junio del próximo año. No obstante, omitió brindar más detalles.
“Se determinó que el instrumento utilizado para realizar dicho seguimiento al plan de acción, es una matriz que no permite estimar de manera razonable el grado de avance en el logro de los productos consignados en el plan, pues, únicamente muestra si una actividad se encuentra en ejecución o finalizada, sin que se muestren plazos de cumplimiento, porcentajes de avance, ni otra información importante para definir el cumplimiento de las metas que ahí se indican”, resalta la CGR.
Dicho plan de acción prioriza las intervenciones en mitigación de los sectores de energía, transporte y agropecuario, los cuales concentran las principales emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en el país.
“El compromiso se adquirió de la boca para afuera”
Allan Astorga, académico y ambientalista, cuestionó la administración Arias Sánchez (2006-2010), que fue la encargada de desarrollar dicho plan y la aprobación contemporánea de proyectos, como la mina en Crucitas de San Carlos.
“Deja ver una contradicción, el compromiso se adquirió más por imagen, de la boca para afuera, que consolidándolo como una meta a realizar al país y prueba de eso es ese informe que otorga la CGR”, cita Astorga.
Para Astorga el país tuvo que haber fijado planes concretos, con temas energéticos que buscaran reducir la independencia de los hidrocarburos en un mediano plazo. “Hay una serie de contradicción entre lo que se dice y lo que se hace”, afirmó.
El reciente vigésimo informe del Estado de la Nación señala la pérdida de biocapacidad (regeneración de recursos) entre los principales problemas que aquejan al sector ambiental del país. La dependencia a los hidrocarburos, especialmente del sector transporte, es uno de los aspectos más cuestionados en el documento.