Imagen con fines ilustrativos. CRH
La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) abrió un proceso sancionatorio en contra de Recope por incumplimiento de calidad.
De acuerdo con la resolución RRG-093-2015 emitida el pasado 18 de febrero, la Aresep detectó sedimentos en las gasolinas súper y plus en el plantel de Recope en Moín, lo que es un incumplimiento.
Las muestras fueron tomadas por el Centro de Investigación en Electroquímica y Energía Química (Celeq), contratado por Aresep para este fin, en octubre del año pasado.
En el Informe de calidad de planteles de Recope del año anterior realizado por Aresep se encuentran los resultados de las pruebas fisicoquímicas y se destaca la presencia de sedimentos en las pruebas tomadas el 10 y 19 de octubre en la gasolina plus, y el 15 de octubre en la gasolina súper.
Si finalmente Aresep concluye que hubo un incumplimiento, el artículo 38 de la Ley 7593 estipula una sanción de 5 a 20 salarios base mínimos.
Este medio solicitó el expediente de esta investigación a Aresep, pero el departamento de prensa indicó que se trata de un expediente restringido.
Recope se defiende
Roy Vargas, gerente de Distribución de Recope aseguró que se trata de un caso aislado y minimizó la cantidad y tamaño del sedimento hallado.
El funcionario explicó que durante el periodo de muestreo se estaba trabajando en un nuevo proyecto en Moín que se prestó para la presencia del material y apenas se estaban realizando las pruebas de la institución, pero que luego se tomaron las medidas correctivas.
Sin embargo, destacó que esos sedimentos no son siquiera perceptibles a simple vista y que solo en algunos casos se puede apreciar a contraluz.
En las demás pruebas que constan en el informe de Aresep, los planteles salieron libres de sedimentos y agua.
Mejorar las pruebas
Por su parte, José Miguel Masís, director de la Cámara de Empresarios de Combustibles aseguró a crhoy.com que el año pasado hubo varias devoluciones de producto a Recope por la detección de sedimentos en sus pruebas de calidad.
El representante del gremio destacó que las gasolineras se enfrentan a procesos caros y engorrosos cuando deben devolver combustible a Recope, puesto que pierden el costo del flete y deben pagar la limpieza del producto.
Sin embargo, Masís manifestó disconformidad por las pruebas que realiza Recope, pues se encuentran desactualizadas para los estándares de calidad que exige la normativa actual.
Más allá de sancionar, Masís destacó la necesidad de solucionar la situación.
Como antecedente, la Asociación de Importadores de Vehículos y Maquinarias (Aivema) encontró, por medio de pruebas certificadas, que los combustibles que se comercializan en el país contienen agua, lo que es altamente perjudicial para los motores de los vehículos.
Con respecto a los sedimentos, los vehículos cuentan con filtros para evitar que ese material afecte el automotor, sin embargo como recomendación es importante revisar esos filtros con regularidad.