










Deterioro de paredes, cielorrasos, pisos, tomacorrientes, muebles de madera, mobiliario en metal, lámparas y cubierta exterior de algunos equipos médicos son los problemas detectados en las áreas de sala de operaciones de los hospitales Calderón Guardia, México, Dr. Tony Facio, Dr. Fernando Escalante Pradilla, Ciudad Neilly, y San Vito.
Esto es parte de una evaluación sobre el estado de conservación y gestión de mantenimiento de las salas de operaciones de dichos centros médicos, hecha por la Auditoría Interna de la Caja Costarricense de Seguro Social.
Dichas anomalías y deficiencias ponen en riesgo la salud de quienes se someten a una intervención quirúrgica, ya que por ejemplo, se incrementa el peligro de una infección.
En el caso del Hospital Calderón Guardia las paredes internas y externas presentan pintura deteriorada o desprendida, otras tienen grietas severas que con solo tocarlas se caen a pedazos.
Las puertas de los quirófanos se encuentran en mal estado de conservación, ya que no cierran adecuadamente, algunos recibidores están oxidados, “desguindadas” o con remiendos con esparadrapo.
Además, se observó herrumbre en los lavamanos ubicados en las entradas a los quirófanos, tanto en las piezas sobre el mismo, como los pedales con que se acciona las llaves de paso. También en algunos casos se colocan recipientes para recoger goteras.
En el Hospital Tony Facio se observó deterioro de los cielorrasos de los pasillos y los quirófanos, algunas paredes golpeadas y rayadas, daños en el piso vinílico o manchados por los tanques de gases médicos, tomacorrientes sueltos de su caja eléctrica y colgando sobre la pared con cables expuestos.
Las láminas de cielorraso presentan problemas de humedad y la pintura en mal estado de conservación, tanto en pasillos asépticos como en los quirófanos.
En el Hospital Dr. Fernando Escalante Pradilla de Pérez Zeledón, se observaron daños de la pintura de las lámparas; oxidación en muebles, bases de algunos equipos y rodines de mobiliario y equipos, algunas láminas de cielorraso manchadas y marcos de puerta con el material de recubrimiento de la pared desprendido.
En el recorrido en el Área de Operaciones del Hospital de Ciudad Neilly se evidenció láminas de cielorraso dañadas por goteras en el techo, paredes que presentaban daños por golpes. Además, se evidenció que el mobiliario de madera y metal de esa Área de Sala de Cirugías se sacó durante la remodelación, pero se ingresó nuevamente en las mismas condiciones de deterioro en que se encontraban antes de la remodelación.
En el Hospital de San Vito se observaron daños severos de las paredes de las salas de parto y en algunos pasillos, oxidación en el mobiliario y equipamiento de metal, cielorrasos con manchas y paredes con indicios de humedad en el Arsenal Quirúrgico.
Por su parte, en el Hospital México también se detectaron problemas similares, pero desde el año pasado se trabajó en la remodelación de las salas.
Causas comunes
La principal causa por el deterioro de las instalaciones del Área de Sala de Operaciones de los centros médicos visitados es la ausencia de un mantenimiento básico suficiente y programado a las paredes, ventanas, pisos, cielorrasos, pasillos y puertas.
También en las redes de fluidos y energéticos, gases médicos, aire acondicionado, agua, electricidad que permita conservar los quirófanos en las condiciones mínimas de los métodos aplicados para la conservación de la esterilidad, que garantice la seguridad del paciente y del personal.
Las situaciones evidenciadas por esta auditoría, elevan las posibilidades de que se materialicen los riesgos de infecciones en los pacientes que son sometidos a procedimientos quirúrgicos, arriesgando la vida del mismo y afectando la imagen institucional.
La recomendación de esta auditoría es instruir a las Direcciones Médicas y Administrativas, Jefaturas del Área de Sala de Operaciones, y del Servicio de Ingeniería y Mantenimiento, que la planta física de los quirófanos y espacios asépticos colindantes deberán mantenerse en perfectas condiciones, sin daños en las superficies de paredes, pisos, cielorrasos o vidrios que pudieran generar contaminación.
Además, el mobiliario en metal y estructuras externas de equipos médicos no deben presentar deterioro en su pintura de recubrimiento dejando superficies porosas u oxidadas.