“Cecilia” es una paciente que llegó al Hospital México para que le realizaran un cateterismo cardíaco, ella estaba en otro centro médico y de un día a otro le realizaron el procedimiento por una orden administrativa…
Dos miembros de la Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social también se hicieron el cateterismo en dicho hospital y tampoco estaban en la lista de espera.
De acuerdo con la Dra. Sofía Bogantes, la misma hija de “Cecilia” (no se quiso brindar más detalle de la paciente) le manifestó “¿qué hacen los que no tienen amigos en este centro médico?”.
Esto se dio a conocer en la comparecencia que tuvo Bogantes, quien es jefa a.í de cardiología del Hospital México, ante los diputados de la comisión especial investigadora del Hospital México,. En abril pasado, Bogantes denunció públicamente la existencia de una lista de 138 personas que fallecieron mientras esperaban un cateterismo cardíaco.
Ella confirmó esta información y manifestó que a estas tres personas se les suma el director del México, Dr. Douglas Montero, quien en el 2009 sufrió un problema cardíaco por lo que fue atendido en cardiología de ese hospital y luego fue remitido al San Juan de Dios para que le realizaran el cateterismo sin dilaciones. Según Bogantes, esto se dio porque los especialistas aseguraron en ese momento que era urgente; igual de urgente que el de los 138 pacientes que fallecieron esperando el mismo procedimiento.
Tras la consulta de crhoy.com a las autoridades del San Juan de Dios sobre este caso particular, se informó que este viernes darán a conocer el parte médico sobre la condición en la que llegó Montero seis años atrás. Aseguran que fue atendido por su condición de paciente delicado y no por ser el Director del Hospital México.
El diputado de la Unidad Social Cristiana, Jorge Rodríguez y presidente de la Comisión, pidió la sustitución del director del México, y asegura que este es un caso “gravísimo” por el delito de tráfico de influencias.
Según Rodríguez, “los dos miembros de la Junta Directiva son Adolfo Jiménez Gutiérrez, a quien se le hizo un cateterismo cardíaco el 3 de enero del 2005 y le colocaron un stent (tipo resorte) en la arteria coronaria derecha, desde luego sin lista de espera. El otro directivo es el Dr. Oscar Ricardo Fallas Camacho, un cateterismo cardíaco con diagnóstico en agosto del 2012, desde luego con un stent, también sin lista de espera y el director del hospital quien tampoco estuvo en lista de espera, él dijo que era una emergencia,” recalcó el legislador.
Sobre estas afirmaciones se le consultó a la Caja para conocer la postura de la Junta Directiva, pero al cierre de la nota no había concluido la reunión de los directivos. La presidenta de la Caja, María del Rocío Sáenz, dijo que no le corresponde a ella referirse sobre este asunto, toda vez que son casos atinentes al expediente clínico personal y por lo tanto de índole confidencial.
Por su parte Montero confirmó que fue atendido en primera instancia en el Hospital México, por un dolor que tuvo en el pecho, lo cual califica como una emergencia, aunque recalca que desconoce porqué los directivos fueron atendidos en el centro médico a su cargo.
100 pacientes de la lista podrían fallecer
De acuerdo con la denunciante, sino se hace el cateterismo a un paciente de alto riesgo, hay un 50 % de probabilidad de que muera y destacó que de la actual lista de espera, que está conformada por unos 700 pacientes, hay 100 que están en esa situación.

Según Dra. Bogantes, “el tiempo de espera de cinco años es inaceptable desde el punto de vista médico, moral y además inhumano. CRH.
Bogantes agregó que no está satisfecha con las respuestas que obtuvo a las cartas que ella y otros funcionarios de la Unidad Cardíaca habían enviado, incluso años atrás a la dirección médica y al nivel central de la Caja donde alertaban esta crisis.
“Todos estos pacientes están muertos, ninguno de ellos era portador de una patología terminal; todos fueron valorados por cardiólogos que dieron la indicación clara del procedimiento de cateterismo evidenciado con estudios. (…) A todos ellos se les entregó una orden de internamiento con la promesa de ser llamados y todos murieron esperando el procedimiento que les pudo salvar la vida, el tiempo de espera de cinco años es inaceptable desde el punto de vista médico, moral y además inhumano,” destacó Bogantes.
De acuerdo con la denunciante, ella está sufriendo persecución laboral en el Hospital México, incluso manifestó que ha sido tratada por su jefatura, y la dirección del hospital como “desleal” a la institucional y como funcionaria que reveló información confidencial.
Un cateterismo cardíaco puede servir para valorar venas y arterias, malformaciones congénitas, válvulas y el sistema eléctrico del corazón.
El 60 % de la población nacional es obesa, mientras que un 25 % de la población es hipertensa con una tendencia a incrementar los factores de riesgo para padecer un mal cardiovascular.
Por el derecho a la salud
A un mes de la denuncia hecha por Bogantes, la especialista manifestó que la situación en el Departamento de Cardiología ha mejorado, ya que le devolvieron los tres días de sala que se requieren para la atención de la lista de espera, se logró reactivar el plan de la atención oportuna de la enfermedad cardiovascular y se han hecho los cambios solicitados desde hace dos años, a favor de los pacientes.
La cardióloga manifestó además que ha recurrido a los mecanismos legales para hacer valer sus derechos como funcionaria, debido a la supuesta persecución laboral y las amenazas que ha recibido.
Según acordó la Comisión Especial, la Dra. Bogantes deberá presentarse este lunes a las 6:05 p.m. para seguir con la comparecencia, mientras que la presidenta de la Caja, María del Rocío Sáenz deberá hacerlo el jueves.