“Ahora los cazadores andan con armas AK-47, 9 mm (…) los cazadores furtivos nos tiran a nosotros (…) Y nosotros con esto no”, comentó Roberto Molina, guardaparques costarricense, en una serie de reportajes publicados en la revista estadounidense Vice.
Molina, quien también forma parte del sindicato de trabajadores del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), participó en una entrega informativa sobre la realidad que se vive en el país con respecto a quienes explotan ilícitamente los recursos naturales.
En tres entregas, Vice, profundizó en la realidad de la cacería ilegal, los hueveros de tortugas y la relación que existe con el tráfico de drogas en zonas ricas en biodiversidad. El reportaje se denominó ‘Shell Game’ (algo así como Juego de Conchas).
Las publicaciones fueron emitidas en Vice News esta semana y colgadas en el sitio web.
“Dado que la conservación de las tortugas marinas en Costa Rica se inició en la década de 1950, los conservacionistas y los cazadores furtivos comparten pacíficamente la playa. Pero el asesinato del ambientalista Jairo Mora Sandoval, en 2013, conmocionó al país ecológico y llamó la atención a un solapamiento violento entre conservacionismo y el tráfico de drogas en abundantes parques nacionales y costas vírgenes”, cita Vice.
Biodiversidad, ‘doble filo’
Vice exaltó el hecho de que el país tenga un 5% de la biodiversidad del mundo, no obstante apuntan a que esto aumenta el grado de vulnerabilidad y el cerco que ha tendido el narcotráfico.
“Sin embargo, es esa misma geografía que hace que el país sea tan vulnerable al violento tráfico de drogas. Costa Rica se ha convertido en un importante punto de transbordo para los narcotraficantes, con consecuencias mortales para las personas atrapadas en el medio”, expusieron.
Al ser consultado, Molina explicó a crhoy.com que los reporteros extranjeros vinieron hace como un mes al país y lo abordaron para conocer más a fondo sobre la realidad que se vive y la escasez de recursos con la que ellos cuentan para enfrentar el resguardo de las áreas protegidas.
“Los hueveros andan armas también, machetes o armas pequeñas. Yo viví eso en Playa Hermosa, andaban machetes, puñales y armas como 22 o 38 mm (…) Los cazadores furtivos sí, el martes tuve que llamar a la Fuerza Pública para agarrar a siete cazadores que andaban AK-47 para cazar jaguares en Bajamar”, expresó Molina.