Los violentos accidentes de tránsito y las muertes en carretera siguen en aumento. Este año se perfila más mortal que el anterior y ya las cifras así lo comprueban. A la primera quincena de junio unas 156 personas han perdido la vida en sucesos lamentables sobre el asfalto, superando los 136 fallecidos que hubo hasta junio de 2013.
Ese incremento de 20 víctimas mortales se ve justificado en el peligro que ha supuesto transitar por la ruta 27, vía que se unió a la ruta 32 y a la autopista Bernardo Soto como las carreteras costarricenses que más vidas cobran anualmente.
“Estamos analizando esos datos comparativos para tomar previsiones, sobre todo donde se marcan la mayor cantidad de incidentes y poner mayor atención para desplazar la Policía de Tránsito al sitio, con operativos preventivos, de velocidad y de alcohol”, comentó Mario Calderón, Jefe de la Policía de Tránsito.
El funcionario no esconde su desazón mientras se le consulta por la ruta 27. Carretera inaugurada en 2010, pero que con el paso de los años se convirtió en una de las vías más peligrosas del país. Equiparándose con una carretera históricamente violenta como la ruta hacia Limón.
“La ruta 27 es la que mayor cantidad de vidas ha dejado en lo que va del año. Indudablemente, tendremos un trabajo preventivo en esa zona y vamos a establecer algunos dispositivos de control de velocidad, de alcoholímetro, de visión y observación para los diferentes dispositivos que tenemos a nivel de seguridad”, dispuso el funcionario.
El exceso de velocidad aunado a una serie de deficiencias en su construcción torna el panorama aún más complejo para quienes transitan en esa autopista. A la primera quincena de mayo, 11 personas habían perdido su vida en violentos accidentes de tránsito.
Existen algunos tramos de la carretera que son todavía más peligrosos. Juan Mora Hidalgo, Subjefe de la Policía de Tránsito en el Pacífico Central inculpó el mes pasado estos hechos a una serie de factores.
“En la curva del kilómetro 71 se han presentado muchos accidentes que han dejado fallecidos. Esto se debe a muchas situaciones, primero, hay un ceda porque se vienen tres carriles, uno que sale de Tivives, más dos carriles adicionales que al final se convierten en uno justo en una curva, por lo que nadie quiere hacer el ceda que hay que realizar. Además de esto, se mezcla la velocidad,” aclaró Mora.
Nuevo jefe admite uso de cámaras
Mario Calderón tomó recientemente el lugar dejado por German Marín como la máxima autoridad en la Policía de Tránsito. Al ser consultado sobre su opinión con respecto al uso de cámaras en carretera, no dudó en avalar estos dispositivos electrónicos que colaborarían con el control en carretera.
“Todos los mecanismos habidos en la tecnología si se utilizan de alguna manera positiva pueden coayudar a la prevención y pueden coayudar a todas las acciones que la Policía de Tránsito pueda establecer. En algunos países hay algunos dispositivos que ayudan”, reconoció el funcionario.
Según datos proporcionados por la pasada dirección de la Policía de Tránsito, en la ruta 27, de aproximadamente 75 kilómetros, se destinan unos ocho oficiales que además de fiscalizar la vía, deben atender otros incidentes en las cercanías.