Imagen con fines ilustrativos. EFE.
La semana anterior un bebé de solo un mes de nacido presenció un enfrentamiento entre su mamá y su abuela, supuestamente, por la custodia del menor. Tras dicho incidente, el niño fue golpeado contra una pared y tuvo que ser trasladado hasta el hospital de Heredia.
De acuerdo con el Patronato Nacional de la Infancia (Pani), el niño fue dado de alta del centro médico el viernes anterior y fue reubicado con un tío abuelo materno.
Los conflictos familiares son la principal causa de atención del Pani. De los 50.338 motivos que se atendieron en el 2014, 5.739 fueron por ese motivo. La mayoría de ellos se dieron en Alajuela, San Carlos y Grecia.
Mientras tanto, las atenciones por maltrato físico sumaron 12.020 casos. La mayoría se dio en la provincia de Alajuela con 1.500 atenciones, seguida de Puntarenas con 1.060 y Alajuelita con 969 casos.
Según el Pani, las agresiones físicas a menores son perpetuadas en un 90% de los casos por los padres o bien, por las personas que están como encargadas de brindar la protección.
Madres jóvenes y familias disfuncionales
La psicóloga de familia, María Esther Flores explicó que si bien no se puede generalizar, muchas veces esos niños que sufren de agresiones y maltratos físicos propiamente, provienen de madres jóvenes o adolescentes, que podrían haber estado ante un embarazo no deseado.
“Eso ya debe de venir desde el momento en el que la muchacha se da cuenta y más bien está tratando de ver cómo se deshace del niño pero como no se pudo hacer, por lo que fuera, cuando nace la ira la descarga en ese niño, porque representa la pérdida de estabilidad económica, o de pareja, familiar, pero no es una constante”, dijo Flores.
Indicó que hay elementos que fallan en una familia para que se den episodios de violencia estos son: la organización familiar y repartición de tareas, la jerarquía que es cuando no se tiene clara quién es la autoridad, otro punto es la comunicación, cuando todos quieren decir algo pero es interpretado de manera distinta por los otros miembros, en último punto es la interacción, cómo cada persona comunica sus cosas.
Laura Álvarez psicóloga de la Línea 1147 del Pani, agregó que la persona que agrede generalmente abusa de la posición de poder en la que está.
“El abuso se da en todo tipo de familia, en todo tipo de clase social, no solamente en las clases más bajas, como antes se creía (…) pero podemos hablar de factores de mayor riesgo donde las personas menores de edad están más vulnerables, como cuando hay violencia intrafamiliar”, dijo la psicóloga.